Eón: el despertar del ojo del dragón, de Alison Goodman.

Eón, el despertar del ojo del dragón, de Alison Goodman. Trad: Juanjo Estella. Ed: Viceversa.

Eón, es en realidad Eona. 

Y que conste que no destripo la historia porque lo deja bien claro desde el primer momento. Es, de hecho, lo que da sentido al argumento.

Eón es, en realidad, un chica que está haciendo algo prohibido, peligroso y que le podría costar la vida: se está preparando para ser un Ojo de Dragón. Y es que en el mundo de Eón los Ojos de Dragón son poderosos: pueden variar el curso de los monzones e influir en la voluntad de las gentes. Son doce, cada uno ligado a un Dragón, que a su vez representa un animal del calendario chino y tiene asociadas una serie de virtudes. Sólo hay un aprendiz cada doce años, y solo uno por dragón. 

El problema para Eona es que sólo los hombres pueden ser Ojos de Dragón. Pero el verdadero embrollo se produce cuando, durante la ceremonia, a Eona no la escoge el dragón rata, sino el dragón espejo, que llevaba quinientos años desaparecido. Claro que la unión entre el dragón y el aprendiz no sale tal y como tocaba.

Y es aquí cuando empieza la aventura. Eona, o Eón, se traslada a la corte. Eón se convierte en el símbolo de la resistencia contra el malvado Ojo del Dragón Rata, en el último apoyo del emperador contra las aspiraciones de su hermano. Y, mientras lidia con las intrigas de la Corte, debe asegurarse de que nadie descubre que es una chica. Para colmo de males, no es capaz de establecer contacto con su dragón. 

Pese a lo que pueda parecer Eona es una protagonista con las ideas y las lealtades claras. Primero, sobrevivir. Segundo, asegurarse de que aquellos a los que quiere también sobreviven. Tercero, averiguar por qué puñetas no puede contactar con su dragón. A diferencia de otros libros de literatura juvenil, los chicos pueden esperar (supongo que esperan hasta el segundo libro). ¡Y no hay un triángulo amoroso!.

En fin, un buen libro de aventuras, con una protagonista atractiva y un dragón espejo con una condición inesperada.